> Río Vivo: Vertido de alperujo (II). Los efectos de la contaminación

viernes, 7 de julio de 2017

Vertido de alperujo (II). Los efectos de la contaminación



En la anterior entrada abordamos cuándo, dónde y cómo se produjo el vertido y las actuaciones de la empresa y administraciones una vez que éste ocurrió. En esta vamos a señalar cuál es el potencial contaminante del alperujo, cuántos kilómetros de río se vieron afectados y los efectos posibles y percibidos en el ecosistema fluvial. En una próxima entrada señalaremos qué responsabilidades tiene la administración autonómica en materia de vigilancia de este tipo de actividades y la valoración que se hace de esta labor.

A través de los medios de comunicación los responsables de las administraciones insisten que el alpeorujo no es tóxico y que su único problema es su alto contenido de materia orgánica que reduce fuertemente el oxígeno del agua. Esto no es cierto, el alpeorujo es tóxico para determinados seres vivos, como veremos a continuación.

El artículo que tomamos como base para indicar cuáles son los efectos sobre el medio ambiente del alpeorujo es "Biorremediación del alpeorujo: estudio de lamicrobiota asociada y producción de expolisacáridos jamilano" de José Antonio Morillo Pérez (2007). Este resumen de la Tesis Doctoral señala que  "Dada la reciente aparición del alpeorujo en relación al alpechín, la mayor parte de los trabajos científicos publicados sobre los efectos ambientales de estos residuos tratan los problemas relacionados con el alpechín...", "la información vertida por éstos es crucial para abordar el problema del alpeorujo ya que como sabemos, el origen de ambos residuos es idéntico y por tanto existen muchas similitudes en su composición, especialmente en la gran cantidad orgánica que representan así como en la presencia de sustancias con posibles efectos tóxicos sobre plantas y microorganismos como polifenoles y ácidos grasos" (pág. 22). Este artículo señala, entre otros los siguientes, efectos sobre el medio ambiente:
  • Actividad antimicrobiana. Aún estando diluido el alpechín debido a la presencia de fenoles y ácidos grasos tiene un efecto antibacteriano. Indicar, como es lógico, que no todos los fenoles tienen el mismo efecto ni inciden de igual manera en los diferentes organismos.
  • Actividad fitotóxica. "El alpechín inhibe la germinación de diferentes tipos de semillas así como el desarrollo prematuro en en diferentes especies vegetales...", "...la aplicación directa del alpechín sobre plantas provoca la abscisión de hojas y raíces.". Esta actividad "se atribuye al alto contenido fenólico y a algunos ácidos orgánicos como el ácido acético o el fórmico".
  • Eutrofización. "Un aumento de la biomasa de los microorganismos de un ecosistema acuático, además del consiguiente desequilibrio ecológico conlleva generalmente un aumento del requerimiento del oxígeno disuelto, circunstancia que puede desembocar en fenómenos de de anoxia...".
  • Efectos tóxicos en animales. "Se ha demostrado que una exposición a 40 mg/l de alpechín durante 15 minutos es suficiente para intoxicar severamente al pez de río Gambusia affinis y a un crustáceo Daphnia magna". En algunas zonas afectadas por el vertido no es exagerado señalar que hubo exposiciones durante horas a concentraciones de 138 mg/l de alpeorujo1.
  • Contaminación por metales pesados. "Un problema añadido a la aplicación directa de alpechín es ls solubilización de metales pesados previamente inmovilizados en el suelo, como por ejemplo el Cu y Zn. En este sentido, parece que el efecto causado sobre le pH del suele es el factor más importante. Además, a un pH determinado el alpechín puede provocar la movilización de metales pesados como Ni, Cd, Zn, Cu, Mn, Pb y Fe." (pág. 29).

En cuanto al tramo de río afectado, se viene señalando una longitud de 20 km, sin embargo esta distancia se refiere a la longitud de la mancha de alpeorujo, esta "lengua" ha ido afectado gravemente a la fauna y a la flora acuática de unos 80 km, en el espacio comprendido entre el pie de la presa de El Carpio y la desembocadura del río Guadiato.

Las consecuencias más visibles de esta contaminación ha sido la gran mortalidad provocada en los peces, Tragsa señala 6 Tm. Sin duda, la mortandad de peces tuvo que ser más elevada donde se produce el vertido y en el embalse de El Salto de Villafranca, las especies afectadas fueron principalmente el alburno, la carpa y el barbo. La prácticamente ausencia de otras especies autóctonas (bogas, cachos, colmillejas, calandinos, etc.) se explica porque su presencia actual en el Guadalquivir es testimonial, señal de que aún siendo éste el vertido más grave de las últimas décadas no es el principal problema de las aguas del Guadalquivir. La contaminación difusa de productos fitosanitarios y una regulación de la cuenca que olvida a nuestra ictiofauna son las causas principales de este deterioro. Lo mismo debemos de decir de los anfibios, estos no se han visto afectados porque no hay salvo la rana común y ésta en bajas densidades.

También la fauna de invertebrados se ha debido ver gravemente afectada, tanto por la falta de oxígeno como por los efectos tóxicos del alpeorujo. Muy probablemente ha desaparecido la práctica totalidad de ejemplares en muchos kilómetros de grupos de animales esenciales para la salud del río, como efémeras, tricópteros, libélulas, pequeños crustáceos, los escasos moluscos que sobrevivían. La recuperación de estos animales va da depender de la capacidad de colonización a partir de los tramos no afectados. Hemos percibir una notable disminución en el número de golondrinas, aviones, vencejos, diferentes especies de  murciélagos, y otros animales que se alimentan de los insectos que emergen de las aguas (efémeras y tricópteros) tan habituales durante el verano.
Especialmente habrá que estar pendientes de la única especie de libélula que se reproduce significativamente en este tramo del río, el Onychogomphus costae, un odonato escaso en su área de distribución que puede haber sido severamente afectado.

Más difícil nos resulta hacer una valoración del efecto sobre el fitoplacton y otras plantas acuáticas. Parece que se está produciendo un aumento de las algas de ambientes ricos en materia orgánica, en detrimento de otras especies.

Con todo es necesario realizar un estudio exhaustivo de la calidad de las aguas en relación que tenga en cuenta tanto parámetros físicos y químicos como en la presencia/ausencia de determinados organismos acuáticos, indicadores de la calidad de las aguas.

Como mucha gente nos pregunta por el martín pescador, la nutria, las garzas y otros animales emblemáticos de nuestro río. Hemos podido comprobar con satisfacción la presencia de todas las estas especies después del episodio de contaminación. Quedaría por estudiar con más detenimiento la presencia de estas especies en las zonas próximas al vertido.


En cuanto a la recuperación, nos gustaría ser optimistas, confiar en la capacidad de regeneración de la naturaleza. Pero como no es cuestión de fe ni de nuestros deseos, sólo nos queda hacer un seguimiento de la salud de nuestro río e impedir que se repitan daños como el causado.

Aquí están los datos, animo a discutirlos y sobre todo aportando estudios en los que se argumenta.

1 La densidad del alpeorujo es superior a la del agua, siendo prudentes y tomando como valor la del agua se vertieron 150.000.000.000 mg. Si el caudal del río fue de unos 30 m3/s y la mancha de contaminante tenía una extensión de 20 km y tardó 2 horas en pasar el volumen de agua afectado fue de 1.080.000.000 litros.

Eclosión de Ephoron virgo (2014) 
Efímera (2012)



Onychogomphus costae (2014)


No hay comentarios: